Tras el acontecimiento de su caballo Bucephalus, Alejandro se ganó el respeto y la distinción de todos, pero como siempre, no le era suficiente. Cuando cumplió 13 años, Filipo llamó a nada más y nada menos que al mismísimo Aristóteles, el gran filósofo para que educara personalmente a Alejandro. Al principio se rehusó, Filipo le ofreció cantidades enormes de dinero y tierras pero Aristóteles no cedía. Finalmente, le hizo una oferta que no pudo rechazar. Le prometió que si iba a educar a Alejandro, Filipo se encargaría de reconstruir su ciudad natal de Estagira, Macedonia. Aristóteles aceptó.
Alejandro ahora tenía al mejor maestro que se pudiera encontrar y las enseñanzas de Aristóteles le siguieron toda su vida. Incluso cuando Alejandro era un hombre de guerra, siempre imperó la razón, tal y como se lo enseñó Aristóteles.
Ahora, Alejandro nació con grandes ideales, mas no todos positivos. 150 años antes de Alejandro, las Guerras Médicas contra los Persas habían devastado Grecia y dejándola al borde de la destrucción. Pero la historia tomó el curso que hoy lleva tras batallas como Maratón, Salmina, Las Termópilas y Platea donde los griegos sobrevivieron a la invasión persa.
Alejandro juró vengar esa guerra, y es el motivo por el que se encaminaría en la campaña de conquistas más grande de la historia. Y su momento había llegado. Cuando el joven Macedonio cumplió 18 años, llegó por fin el momento de demostrar su pericia y valía. En el año 338 a.C., Tebas y Atenas se enfrentaron a Filipo y a Alejandro en la Batalla de Queronea. Alejandro estuvo al mando de los 1.800 jinetes de caballería pesada, su momento había llegado.
Alejandro ahora tenía al mejor maestro que se pudiera encontrar y las enseñanzas de Aristóteles le siguieron toda su vida. Incluso cuando Alejandro era un hombre de guerra, siempre imperó la razón, tal y como se lo enseñó Aristóteles.
Ahora, Alejandro nació con grandes ideales, mas no todos positivos. 150 años antes de Alejandro, las Guerras Médicas contra los Persas habían devastado Grecia y dejándola al borde de la destrucción. Pero la historia tomó el curso que hoy lleva tras batallas como Maratón, Salmina, Las Termópilas y Platea donde los griegos sobrevivieron a la invasión persa.
Alejandro juró vengar esa guerra, y es el motivo por el que se encaminaría en la campaña de conquistas más grande de la historia. Y su momento había llegado. Cuando el joven Macedonio cumplió 18 años, llegó por fin el momento de demostrar su pericia y valía. En el año 338 a.C., Tebas y Atenas se enfrentaron a Filipo y a Alejandro en la Batalla de Queronea. Alejandro estuvo al mando de los 1.800 jinetes de caballería pesada, su momento había llegado.
La influencia aristotélica en Alejandro realmente fue importante. Fue la gran influencia bajo la cual moldeó toda su idea imperial, desde la unificación de la Hélade hasta la colonización y helenización del oriente con los Epígonos.
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